Blogia
TURCÓN - Ecologistas en acción

El CES cuestiona el PIO de Gran Canaria, que prevé duplicar la oferta turística

El CES cuestiona el PIO de Gran Canaria, que prevé duplicar la oferta turística IDEAPRESS. Santa Cruz de Tenerife, 13-7-2004

El Consejo Económico y Social (CES) de Canarias ha cuestionado el modelo territorial de Gran Canaria propuesto por el Plan Insular de Ordenación (PIO) de 2003, adaptado al Texto Refundido de las leyes de ordenación del territorio y de espacios naturales de Canarias.

El Consejo afirma que se prevé duplicar la oferta turística existente y que "no se pone freno a un consumo de suelo desmesurado" en la zona costera en la que se centraliza el desarrollo de la Isla. También detecta un desequilibrio entre el suelo urbanizable y la potencial demanda demográfica y económica.

El informe anual de CES 2003-2004 ha dedicado uno de sus trabajos monográficos a analizar el modelo territorial de Gran Canaria tomando como base los cambios que se han producido entre el Plan Insular de Ordenación del Territorio (PIOT) de 1995 y el PIO de 2003. Las conclusiones globales evaluadas para determinar si el modelo propuesto es compatible con el desarrollo sostenible dice que, en cuanto a centralizar el desarrollo en la franja costera, la carga que se le da al territorio es "muy alta ya que no se pone freno a un consumo de suelo desmesurado, derivado de los nuevos crecimientos previstos por el planeamiento municipal, no se hace frente al progresivo abandono de las áreas agrícolas que puede derivar en un mayor consumo de suelo para uso urbano, imposibilitando la mezcla y la variedad de actividades".

El Consejo reconoce que el planeamiento insular ha intentado mejorar la ocupación extensiva y poco respetuosa del espacio turístico y que ha apostado por la creación de un modelo turístico de mayor calidad. Desde ese punto de vista, señala el informe, la propuesta es válida, tanto en la forma de enfrentarse a los problemas estructurales como en la manera de plantear la ocupación en los nuevos espacios.

Advierte, sin embargo, que aboga claramente por la expansión territorial del turismo al "asumir" el suelo previsto por el planeamiento municipal "lo que significa duplicar la oferta existente". En opinión del CES, esto supone "sobredimensionar" un espacio afectado de "importantes" problemas estructurales que "no son fáciles de solucionar, sin olvidar que las posibles situaciones coyunturales desfavorables, podrían dar lugar a una sobreoferta tanto del tejido edificado como de suelo para urbanizar".

En relación a los nuevos crecimientos, el planteamiento que desde los planes municipales se hace en Gran Canaria, "sobre todo en la versión actualmente vigente"; el consejo resalta el "claro predominio" del uso residencial como destino excepto en el Sur y en el corredor industrial de Telde.

El CES insiste en llamar la atención en la "evidente influencia" del planeamiento municipal en la distribución e integración de los nuevos suelos a urbanizar en el modelo insular. También define un "desequilibrio en la estricta necesidad" de la superficie de nuevo suelo urbanizable respecto a la "potencial demanda" demográfica y económica. Un aspecto, continúa el informe, que contribuye "a aumentar el actual deterioro" del paisaje costero de la Isla. Dicho proceso es más acentuado en determinadas zonas "ya muy urbanizadas", como Telde, Vecindario, Arucas y, en menor medida, el Noroeste grancanario.

Desde la óptica de preservar los espacios con mayor valor paisajístico, la protección que se propone para el interior permite potenciar esa parte del territorio "como patrimonio natural e incidir en su mantenimiento". Sin embargo, según agrega el informe, esa misma protección, en algunos ámbitos, restringe posibles usos agropecuarios "con lo que dificulta esa idea de equilibrio basada en el mantenimiento y modernización de las actividades primarias".

El consejo describe el abandono del consumo de suelo en las zonas rurales y su relación directa con su cercanía a los espacios más urbanizados, de tal forma que "actúan como polos de atracción en la absorción" de dicho suelo. El medio rural, continúa, "en general no escapa al proceso de presión urbanística". Las zonas de medianías, como la franja costera del corredor Noroeste y Sureste, lo límites de los núcleos de población "entran en competencia con ambos tipos de agricultura".

Otra de las conclusiones de este estudio monográfico sobre Gran Canaria se detiene en la tendencia del tratamiento estratégico a una "basculación" hacia la mitad oriental de la Isla que al CES le lleva "a la discusión del concepto de equilibrio en el sistema espacial previsto". El consejo defiende la interpretación de que el equilibrio debe corresponderse con la preservación de los espacios de mayor valor paisajístico frente al proceso de consolidación y cohesión de los actuales espacios urbanos. En este aspecto, el CES sugiere "una sana discusión".

0 comentarios