Científicos españoles constatan la progresiva aceleración del deshielo en los casquetes polares
El Mundo, 17-2-2005
SALAMANCA MADRID.- La investigación que llevan a cabo científicos españoles en los círculos Artico y Antártico para medir el calentamiento global mediante la velocidad a la que se funden los glaciares constata que estos "sensores naturales" se funden de forma cada vez más acelerada, proceso que se ha duplicado en 13 años. La causa, una vez más, son los gases de efecto invernadero.
Los profesores Adolfo Eraso, de la Universidad Politécnica de Madrid, y Carmen Domínguez, de la de Salamanca, acaban de llegar de la Antártida, donde trabajan desde el 14 de noviembre en la segunda fase del proyecto "GLACKMA". Los científicos han explicado que una de las principales conclusiones de su trabajo es que, en la misma latitud, el deshielo se realiza unas cuatro veces más rápido en el Ártico que en la Antártida, algo que puede atribuirse al nivel de población o a la emisión de gases que se producen en uno u otro hemisferio.
Durante los últimos tres meses han trabajado en la uruguaya Base Artigas, situada en la Antártida Insular, y también en la Patagonia Chilena, con el fin de recoger los datos registrados por las estaciones de medición y comprobar su buen funcionamiento, dificultado por las duras condiciones meteorológicas. Prueba de ello es que el clima adverso les impidió cumplir otro de sus objetivos, adentrarse en el interior de la Península Antártica para fijar nuevos puntos de medición del deshielo.
Bajo el hielo corren en muchas ocasiones ríos de agua. (Foto: Proyecto GLAKMA)
Bajo el hielo corren en muchas ocasiones ríos de agua. (Foto: Proyecto GLAKMA)
El proyecto consiste en la instalación de estaciones de medida en los glaciares de los hemisferios Norte y Sur que calibran cada hora la descarga glaciar, es decir, cómo se van derritiendo los casquetes naturales al paso que les afectan los cambios en el clima y la atmósfera. De esta manera, los glaciares pueden actuar como "sensores naturales" del calentamiento global.
En los tres años que ha durado la primera fase de la investigación se han instalado cuatro estaciones, de las que dos se encuentran en casquetes glaciares del Hemisferio Norte (Artico noruego e Islandia) y dos en casquetes del Sur (Antártida insular y Patagonia chilena). Gracias a las medidas que han registrado hasta ahora se ha podido saber que la descarga glaciar aumenta de forma exponencial cada año, y que cualquier variación en la temperatura ambiente conlleva una respuesta inmediata en el deshielo de los glaciares.
También se ha averiguado que, a la misma latitud, la descarga glaciar es cuatro veces mayor en el Artico que en la Antártida, algo que se explica en que en el hemisferio Norte se concentra la mayor parte de la población terrestre, además de algunos de los países más contaminantes. Eraso precisó que a 62 grados de latitud en el verano antártico la cantidad de agua que se derrite es de 0,2 a 0,3 metros cúbicos por segundo y por kilómetro cuadrado de cuenca glaciar, es decir, de doscientos a trescientos litros de agua se suman cada segundo al mar, una cifra "importante" según el científico.
En último término, se trata de tener un registro continuo de datos sobre el calentamiento global que España aportará a la comunidad científica internacional, ya que el proyecto está financiado por el Instituto Nacional de Meteorología del Ministerio de Medio Ambiente.
Para mantener en funcionamiento los puntos de medición, el proyecto sostiene convenios con instituciones de países con bases cercanas abiertas todo el año en las zonas Norte y Sur, como Uruguay, Chile, Rusia, Noruega y Alemania, porque España sólo mantiene operativas las suyas durante el verano de cada hemisferio.
SALAMANCA MADRID.- La investigación que llevan a cabo científicos españoles en los círculos Artico y Antártico para medir el calentamiento global mediante la velocidad a la que se funden los glaciares constata que estos "sensores naturales" se funden de forma cada vez más acelerada, proceso que se ha duplicado en 13 años. La causa, una vez más, son los gases de efecto invernadero.
Los profesores Adolfo Eraso, de la Universidad Politécnica de Madrid, y Carmen Domínguez, de la de Salamanca, acaban de llegar de la Antártida, donde trabajan desde el 14 de noviembre en la segunda fase del proyecto "GLACKMA". Los científicos han explicado que una de las principales conclusiones de su trabajo es que, en la misma latitud, el deshielo se realiza unas cuatro veces más rápido en el Ártico que en la Antártida, algo que puede atribuirse al nivel de población o a la emisión de gases que se producen en uno u otro hemisferio.
Durante los últimos tres meses han trabajado en la uruguaya Base Artigas, situada en la Antártida Insular, y también en la Patagonia Chilena, con el fin de recoger los datos registrados por las estaciones de medición y comprobar su buen funcionamiento, dificultado por las duras condiciones meteorológicas. Prueba de ello es que el clima adverso les impidió cumplir otro de sus objetivos, adentrarse en el interior de la Península Antártica para fijar nuevos puntos de medición del deshielo.
Bajo el hielo corren en muchas ocasiones ríos de agua. (Foto: Proyecto GLAKMA)
Bajo el hielo corren en muchas ocasiones ríos de agua. (Foto: Proyecto GLAKMA)
El proyecto consiste en la instalación de estaciones de medida en los glaciares de los hemisferios Norte y Sur que calibran cada hora la descarga glaciar, es decir, cómo se van derritiendo los casquetes naturales al paso que les afectan los cambios en el clima y la atmósfera. De esta manera, los glaciares pueden actuar como "sensores naturales" del calentamiento global.
En los tres años que ha durado la primera fase de la investigación se han instalado cuatro estaciones, de las que dos se encuentran en casquetes glaciares del Hemisferio Norte (Artico noruego e Islandia) y dos en casquetes del Sur (Antártida insular y Patagonia chilena). Gracias a las medidas que han registrado hasta ahora se ha podido saber que la descarga glaciar aumenta de forma exponencial cada año, y que cualquier variación en la temperatura ambiente conlleva una respuesta inmediata en el deshielo de los glaciares.
También se ha averiguado que, a la misma latitud, la descarga glaciar es cuatro veces mayor en el Artico que en la Antártida, algo que se explica en que en el hemisferio Norte se concentra la mayor parte de la población terrestre, además de algunos de los países más contaminantes. Eraso precisó que a 62 grados de latitud en el verano antártico la cantidad de agua que se derrite es de 0,2 a 0,3 metros cúbicos por segundo y por kilómetro cuadrado de cuenca glaciar, es decir, de doscientos a trescientos litros de agua se suman cada segundo al mar, una cifra "importante" según el científico.
En último término, se trata de tener un registro continuo de datos sobre el calentamiento global que España aportará a la comunidad científica internacional, ya que el proyecto está financiado por el Instituto Nacional de Meteorología del Ministerio de Medio Ambiente.
Para mantener en funcionamiento los puntos de medición, el proyecto sostiene convenios con instituciones de países con bases cercanas abiertas todo el año en las zonas Norte y Sur, como Uruguay, Chile, Rusia, Noruega y Alemania, porque España sólo mantiene operativas las suyas durante el verano de cada hemisferio.
6 comentarios
isaias -
No al ecoborreguismo -
tengo peneeeee -
mmmmmmmmmmm -
pero el problema es q si es interesante poh
yo creo q si nadie los postea es porke algo falta en la info o si no meo mundo los postearia
jaajjajajaj
Raul -
julia royol -