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TURCÓN - Ecologistas en acción

¡Qué lindo gatito!

¡Qué lindo gatito! Recientemente, el Grupo de Especialistas de Especies Invasoras de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN) ha hecho pública la lista de las 100 especies invasoras más peligrosas del mundo (www.issg.org).

Entre los animales incluidos figura, aunque pueda sorprender a algunos lectores, el gato. (Vea el artículo De cómo un solo gato puede exterminar una especie)

El gato doméstico desciende del gato silvestre eurasiático y fue domesticado en tiempos prehistóricos. Los gatos asilvestrados, entendiendo por asilvestrados aquellos animales que no dependen del hombre para su supervivencia, han sido responsables de la extinción o rarefacción de numerosas especies de animales, particularmente aves y reptiles, en numerosas islas a lo largo del mundo. En muchas ocasiones han sido introducidos como animal de compañía o para controlar plagas de roedores, pero el resultado ha sido, en la mayoría de los casos, catastrófico para especies insulares que habían evolucionado en ausencia de depredadores. La situación ha llegado a ser tan grave que los gobiernos de países como Nueva Zelanda, Australia y Estados Unidos, por citar algunos, han tenido que desarrollar intensos programas de control y erradicación de gatos utilizando trampas, potentes venenos e, incluso, la difusión de enfermedades infecciosas específicas de felinos.

El efecto negativo de los gatos sobre la fauna endémica de muchas islas generalmente se ha unido a la alteración de los hábitats por la acción de herbívoros (cabras, conejos, etc.) o plantas introducidas y, en el peor de los casos, a la presencia de ratas. Algunos ejemplos tristemente famosos son el del chochín de la isla de Stephen (Nueva Zelanda) y el del petirrojo negro endémico de la Islas Chatham. El chochín de la Isla de Stephen era un ave no voladora cuyos efectivos ya habían sido diezmados por la rata polinesia y a cuya desaparición contribuyó definitivamente el gato del farero de la isla en 1894. En el segundo caso, los europeos, en el siglo XIX, introdujeron gatos para controlar los conejos en la Isla de Mangere y terminaron exterminando 12 especies de aves, entre ellas el petirrojo negro.

Los gatos asilvestrados suponen un peligro para la supervivencia de numerosas especies endémicas

Los gatos en Canarias

En Canarias, los gatos fueron introducidos por los pobladores prehispánicos, si bien su máxima expansión se debió dar a partir de la colonización europea. Su efecto sobre el medio natural anterior al siglo XX no es bien conocido, pero se apunta que pudieron ser responsables, junto a los perros y al propio hombre, de la disminución de las poblaciones de grandes lagartos y de aves que habían reducido o perdido su capacidad de vuelo como adaptación a la falta de depredadores. Actualmente, se sabe que es un depredador generalista que se alimenta fundamentalmente de otros mamíferos introducidos como el conejo, pero que también consume especies amenazadas y legalmente protegidas como el lagarto gigante de El Hierro, el lagarto gigante de La Gomera, el lagarto canario moteado, la lisneja, las palomas turqué y rabiche, el petrel de Bulwer, varias especies de paíños, el alcaraván, la musaraña canaria y la de Osorio, etc. Se considera, pues, como un factor que amenaza la superviviencia de especies de gran interés para la conservación de la biodiversidad nativa de Canarias.

El caso más preocupante es, en mi opinión, el de los lagartos gigantes, pues se trata de especies endémicas, con un área de distribución restringida y con poblaciones reducidas. Las estimaciones de población realizadas por los expertos cifran entre 150 y 200 individuos la población del lagarto gigante de El Hierro, en el Risco de Tibataje; de 281 a 461 la del lagarto canario moteado, en el Acantilado de Teno (Tenerife); y en ¡menos de 20! los lagartos gigantes de La Gomera, en el Risco de La Mérica.

Las Administraciones Públicas tienen la obligación de velar por la preservación de nuestra flora y fauna y, en particular, por aquellas especies amenazadas exclusivas de Canarias. Por ello, es necesario adoptar medidas de control de los gatos asilvestrados, pues afectan negativamente a las citadas especies amenazadas. De hecho, algunos instrumentos de planeamiento de espacios naturales protegidos y planes de gestión de especies amenazadas de Canarias, contemplan la necesidad de controlar o erradicar gatos en su ámbito de aplicación tratando, por supuesto, de capturarlos en vivo o, cuando ello no es posible, sacrificándolos con medios no cruentos.

Los gatos en la legislación

En lo que se refiere a su situación legal, la Ley de Caza de Canarias permite dar la consideración de especies de caza menor a los animales asilvestrados. Por otra parte, la Ley 8/1991, de 30 de abril, de Protección de los Animales, considera animales de compañía a aquéllos que, mantenidos por el hombre, los alberga principalmente en su hogar. Asimismo, el Reglamento de la citada Ley determina que quien ostente la posesión de un animal de compañía lo debe mantener en lugares donde se pueda ejercer su adecuada atención y vigilancia. Además, deberá adoptar las medidas necesarias para que no pueda acceder a vías, espacios públicos o privados, así como impedir el libre acceso a personas, animales o cosas que se hallen en aquéllos. También debemos recordar que el dueño del animal es responsable de las molestias, daños y perjuicios que éste pueda producir a personas, animales, cosas, espacios públicos y al medio natural en general, de acuerdo con lo establecido en el Código Civil.


¿Hay solución?

Evitar que los gatos continúen afectando negativamente a determinadas especies amenazadas no es tarea fácil. Sin embargo, son varias las actuaciones que se pueden desarrollar para mitigar su efecto. Es necesario continuar con los programas de control de este felino si incide sobre especies muy amenazadas, mediante su captura en vivo y extracción de la zona y, cuando ello es posible (algunas zonas acantiladas), construyendo barreras físicas. La información y la divulgación del peligro que supone para muchas especies amenazadas el asilvestramiento de los gatos ayudaría a prevenir su introducción en islotes donde está ausente, y sensibilizaría a los dueños de mascotas sobre la necesidad de su debido control, identificación, registro en los censos municipales e, incluso, sobre la conveniencia de su esterilización. En este ámbito, la colaboración de las organizaciones no gubernamentales de carácter ecologista y de protección de los animales domésticos, y de los consultorios veterinarios, puede ser de gran ayuda. Todo ello, considerando el complicado reparto de competencias entre las diferentes administraciones, requiere un importante nivel de coordinación interadministrativa.

Puede resultar paradójico que los que trabajamos en conservación de la fauna silvestre podamos plantear la necesidad de controlar especies, tanto animales como vegetales, que fuera del área de distribución natural se convierten en una amenaza para la supervivencia de otras que, frecuentemente, son endémicas. En el caso de los animales invasores, que en muchas ocasiones son de origen doméstico, cualquier actuación para su control se debe realizar tras un concienzudo análisis, con una estricta planificación, explicando a la sociedad su necesidad, dándole un papel activo y participativo y, por supuesto, con el máximo respeto a los derechos de los animales.

Artículo de Juan Luis Rodríguez Luengo
Biólogo. Servicio de Biodiversidad
Medio Ambiente CANARIAS
Revista de la Consejería de Política Territorial y Medio Ambiente
GOBIERNO DE CANARIAS
Revista 22 / Año 2001

4 comentarios

Pilar -

La mayor plaga y amenaza es el hombre es el cáncer de este planeta.En mi casa tengo 10 gatos maravillosos, que me llenan de amor, que me acompañan y me hacen reír. En lugar de preocuparnos por el futuro de los lagartos, mas nos valía preocuparnos del futuro del planeta. Si tan molestos son esos gatos deberíamos preguntarnos por que están ahí. Estan ahi por que en un momento dado hemos comprado un gatito y luego al crecer o antes nos hemos arrepentido y lo hemos echado a la calle o por que nuestra gata se quedó preñada y tiramos a los gatitos a la calle. Se hacen campañas constantemente de esterilización de gatos, si usted se encuentra con un gato y no lo quiere hay refugios y protectoras. Dada la naturaleza del hombre esta claro que lo sencillo es matar.
Seguramente el agujero de la capa de ozono no les afectan a esos preciados lagartos.
Matemos a esos gatos y sigamos contaminando ensuciando el litoral y haciendo mas grande el agujero de la capa de ozono.

Jorge Emilson -

Los gatos pueden ser bonitos y tal, pero no dejan de ser destructivos con el medio ambiente. Veo bien que se lleve a cabo un exterminio de gatos asilvestrados y de gatos domésticos cuyos amos se despreocupan. Aunque no hay que olvidar que el verdadero problema canario es el exceso de habitantes, básicamente por la necesidad que tienen algunos de enriquecerse a costa del turismo, aunque sea destruyendo la isla.

Inmaculada Hdez -

Estoy en el Municipio de Barlovento, en la isla de La Palma y hace poco le han envenenado unos gatitos a un amigo y vecino mío para ser concreto tres gatos y una gata. A los que mantenía en su casa y a su vez cazaban algún que otro ratón, ya que vivimos en el campo. Fuí a comentárselo a un responsable del Ayuntamiento para preguntar si estaban mandando a envenenar gatos o algo por el estilo y me lo negó diciendo que tenían otras cosas mejores que hacer que matar gatos; al margen del problema de los gatos les comenté si estaban echando veneno indiscriminadamente ya que tengo perros a los que saco a caminar y la perra se me envenenó aunque la logré salvar. Le pregunté dónde podría denunciar el hecho y me dijo que no hay ningún organismo en la isla que lleve denuncias de estas características. No obstante seguí averiguando la situación y me enteré que una persona de Medio ambiente que trabaja en Barlovento le han dado una orden no se si de medio ambiente porque los gatos supuestos silvestres, que no hay tantos porque la mayoría son domésticos, y si hay es porque los han abandonado, les habían dado una orden de matar a los gatos silvestres porque estaban acabando con los lagartos Y yo me pregunto porqué no prohíben echar venenos sin información al ciudadano y los dueños de la vid echan venenos en botes con agua en el suelo para matar a los lagartos que se acercan y de camino a los pájaros o cualquier animal que beba inocentemente del agua? Qué clase de gobierno tenemos a dónde puedo dirigirme por favor, estoy tan indignada que quiero sacarlo en la prensa pero no sé a quién acusar pues se encubren unos a otros, ésto es una verguenza y está pasando en una isla que presume de ser reserva de la biosfera.

sara -

Estoy de acuerdo, bien, los gatos son una especie invasora y que contribuye con otras especies introducidas en la extinción de especies autóctonas como pueden ser los lagartos...Lo que no me parecen bien son las medidas utilizadas para controlar las poblaciones de gatos. Primero porque existen censos para definir los gatos domésticos y asilvestrados que hay, porque no se pueden tomar la justicia por su mano los ayuntamientos y empezar a matar gatos como lo ha hecho el ayuntamiento de Barlovento, en la Palma. Éste, le da la orden a un inculto de medio ambiente, para que mate a todos los gatos asilvestrados, sobre todo los del parque de la laguna, en el que los gatos molestan mucho porque los abandonan allí (sin haber ningún control por parte de los guardias, que no se mueven) y después dicen que los aniquilan por la problemática con los lagartos, cuando en la Laguna es muy difícil ver un lagarto...A parte, de que como es un pueblo donde se conoce todo el mundo, pues de paso el que está encargado de matar a los gatos asilvestrados, pues también mata a un par de ellos más de unos dueños a los que les tiene manía, total como son un par más...Éste fue mi caso, y me duele en el alma, porque eran dos gatitas, esterilizadas, que llevaban conmigo cuatro años, con cuidados veterinarios, vacunadas, operada una de una pata rota....
Se aprovechan de la situación porque no hay información...y en la palma no he visto por ningún sitio que haya problema de los gatos con los lagartos y si lo hay que lo pongan de una vez en los periódicos y que adopten medidas que, como bien dice Juan Luis, el escritor de este artículo, respeten los derechos de los animales. RESPETEN LOS DERECHOS DE LOS ANIMALES!