Plan de cría del caballito de mar en Telde
Taliarte inicia un plan de cría del caballito de mar
J. Darriba - Canarias-7.
Un grupo de investigadores canarios ha iniciado un programa para reproducir en cautividad caballitos de mar. Las instalaciones del Instituto Canario de Ciencias Marinas, en Taliarte, serán el escenario de una iniciativa que tiene como objetivo recuperar las poblaciones de estos peces, en franco retroceso, y fomentar el comercio de especies criadas en cautividad.
El Grupo de Investigación en Acuicultura (GIA) de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC), que dirige Marisol Izquierdo, junto al Instituto de Investigaciones Marinas del CSIC y la Universidad de Lugo, ha estado investigando desde 2003 las posibilidades de reproducción en cautividad de otro caballito, el pejepipa (Syngnathus acus) y ahora quiere extenderla a la especie Hippocampus hippocampus, el de la forma tradicional, que se encuentra catalogado como especie vulnerable.
«La cría en cautividad es una de las medidas más eficaces para la recuperación de especies en peligro», aclaró Izquierdo, «en el mar, la reproducción controlada de las especies por medio de la acuicultura ha permitido en muchas especies, incluyendo el caballito de mar en Hawaii o Australia, mantener la biodiversidad animal y reducir la presión humana sobre las poblaciones salvajes».
Este proyecto ha dado ya sus primeros pasos. Se están localizando las poblaciones de la Isla -fundamentalmente en El Cabrón, Sardina, Melenara y Arguineguín- con el fin de conocer el número de ejemplares, las condiciones y características del ecosistema y para escoger el lugar del que coger las primeras parejas sin que afecte al medio natural.
Los expertos consideran que entre 10 y 20 ejemplares son suficientes para iniciar las primeras experiencias de reproducción aunque para su captura todavía hace falta un permiso de la Consejería de Medio Ambiente del Gobierno de Canarias puesto que se trata de animales protegidos por la actual legislación.
Una de las ventajas que representa la cría es que no necesita grandes instalaciones. Con peceras de 150 litros para los adultos o de 50 litros para crías es suficiente para iniciar la experiencia, para la que se ha solicitado financiación al Ministerio de Educación a través de los Planes Nacionales de Investigación.
En todo caso, el Hippocampus presenta graves problemas de adaptación. Se trata de animales muy delicados: pueden morir con las burbujas de aire -se las tragan y se les atragantan en el esófago- y les cuesta mucho adaptarse a la vida en acuario y a la comida.
Criados en 'lavadoras'
Marisol Izquierdo explica el proyecto en la sede del ICCM.
Una de las peculiaridades de la cría de caballitos de mar (Hippocampus hippocampus) es que se quieren instalar unos tanques esféricos donde se van a desarrollar estos peces. Hay dos razones que justifican la elección de este tipo de peceras: por un lado, permiten la máxima calidad del agua y, por otro, contribuyen a evitar la formación de burbujas, que pueden resultar mortales para estos pequeños animales. Los especialistas en el cultivo de caballitos de mar hacen referencia a este tipo de acuarios como lavadoras.
Se alimentan de un tipo de crustáceo, los misidáceos -parecidos a los camarones- cuya cría en cautividad presenta todavía mayores problemas que los del propio caballito de mar. Por eso, se quiere probar con la artemia -otra especie de camarón muy apreciada como base alimenticia de la acuicultura.
Los peces más raros del océano
Pese a lo que se pueda suponer, los caballitos de mar son peces. Pertenecen a la misma familia que las viejas, las doradas o las lubinas si bien presentan grandes diferencias con sus congéneres. Son animales que apenas se mueven durante toda su vida, que son monógamos -con una pareja para toda la vida- y que realizan parada nupcial, una especie de cortejo. Por si fuera poco, los machos son los que se encargan del cuidad de los huevos que les depositan las hembras.
Madurez en sólo 20 días
Los caballitos de mar son uno de los animales con una tasa de crecimiento más rápida. En sólo 20 días pasa de juvenil a adulto y durante el primer año de cautividad ya empieza a reproducirse. Pone entre 50 y 300 huevos -los demás peces suelen depositar millones- y viven en zonas alejadas de las olas y las turbulencias aunque a profundidades no superiores a los 12 metros. Viven entre 5 y 10 años y alcanzan un peso de unos 5 o 6 gramos. Medio centenar de países comercian con los caballitos de mar para supuestos fines medicinales y decorativos.
J. Darriba - Canarias-7.
Un grupo de investigadores canarios ha iniciado un programa para reproducir en cautividad caballitos de mar. Las instalaciones del Instituto Canario de Ciencias Marinas, en Taliarte, serán el escenario de una iniciativa que tiene como objetivo recuperar las poblaciones de estos peces, en franco retroceso, y fomentar el comercio de especies criadas en cautividad.
El Grupo de Investigación en Acuicultura (GIA) de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC), que dirige Marisol Izquierdo, junto al Instituto de Investigaciones Marinas del CSIC y la Universidad de Lugo, ha estado investigando desde 2003 las posibilidades de reproducción en cautividad de otro caballito, el pejepipa (Syngnathus acus) y ahora quiere extenderla a la especie Hippocampus hippocampus, el de la forma tradicional, que se encuentra catalogado como especie vulnerable.
«La cría en cautividad es una de las medidas más eficaces para la recuperación de especies en peligro», aclaró Izquierdo, «en el mar, la reproducción controlada de las especies por medio de la acuicultura ha permitido en muchas especies, incluyendo el caballito de mar en Hawaii o Australia, mantener la biodiversidad animal y reducir la presión humana sobre las poblaciones salvajes».
Este proyecto ha dado ya sus primeros pasos. Se están localizando las poblaciones de la Isla -fundamentalmente en El Cabrón, Sardina, Melenara y Arguineguín- con el fin de conocer el número de ejemplares, las condiciones y características del ecosistema y para escoger el lugar del que coger las primeras parejas sin que afecte al medio natural.
Los expertos consideran que entre 10 y 20 ejemplares son suficientes para iniciar las primeras experiencias de reproducción aunque para su captura todavía hace falta un permiso de la Consejería de Medio Ambiente del Gobierno de Canarias puesto que se trata de animales protegidos por la actual legislación.
Una de las ventajas que representa la cría es que no necesita grandes instalaciones. Con peceras de 150 litros para los adultos o de 50 litros para crías es suficiente para iniciar la experiencia, para la que se ha solicitado financiación al Ministerio de Educación a través de los Planes Nacionales de Investigación.
En todo caso, el Hippocampus presenta graves problemas de adaptación. Se trata de animales muy delicados: pueden morir con las burbujas de aire -se las tragan y se les atragantan en el esófago- y les cuesta mucho adaptarse a la vida en acuario y a la comida.
Criados en 'lavadoras'
Marisol Izquierdo explica el proyecto en la sede del ICCM.
Una de las peculiaridades de la cría de caballitos de mar (Hippocampus hippocampus) es que se quieren instalar unos tanques esféricos donde se van a desarrollar estos peces. Hay dos razones que justifican la elección de este tipo de peceras: por un lado, permiten la máxima calidad del agua y, por otro, contribuyen a evitar la formación de burbujas, que pueden resultar mortales para estos pequeños animales. Los especialistas en el cultivo de caballitos de mar hacen referencia a este tipo de acuarios como lavadoras.
Se alimentan de un tipo de crustáceo, los misidáceos -parecidos a los camarones- cuya cría en cautividad presenta todavía mayores problemas que los del propio caballito de mar. Por eso, se quiere probar con la artemia -otra especie de camarón muy apreciada como base alimenticia de la acuicultura.
Los peces más raros del océano
Pese a lo que se pueda suponer, los caballitos de mar son peces. Pertenecen a la misma familia que las viejas, las doradas o las lubinas si bien presentan grandes diferencias con sus congéneres. Son animales que apenas se mueven durante toda su vida, que son monógamos -con una pareja para toda la vida- y que realizan parada nupcial, una especie de cortejo. Por si fuera poco, los machos son los que se encargan del cuidad de los huevos que les depositan las hembras.
Madurez en sólo 20 días
Los caballitos de mar son uno de los animales con una tasa de crecimiento más rápida. En sólo 20 días pasa de juvenil a adulto y durante el primer año de cautividad ya empieza a reproducirse. Pone entre 50 y 300 huevos -los demás peces suelen depositar millones- y viven en zonas alejadas de las olas y las turbulencias aunque a profundidades no superiores a los 12 metros. Viven entre 5 y 10 años y alcanzan un peso de unos 5 o 6 gramos. Medio centenar de países comercian con los caballitos de mar para supuestos fines medicinales y decorativos.
13 comentarios
marco antonio -
victor -
eduardosk -
Sary -
Sary
MILUSKA -
GRACIAS
Ericka -
martin -
Wilbert Ramos Perez -
PABLO -
facundo -
muchas gracias
Hernan -
Fernando -
Fernando
Hernan -