Turcón pide más sensibilidad con la Montaña Rajada
En una carta dirigida al empresario "Francisco Martín Vega", actual director de la explotación minera del Cortijo de Tio Isidro-cerca del Lomo Blanco-, el Colectivo Ecologista Turcón le pide una responsable consideración con tan emblemática montaña, elemento geológico de primera magnitud del Campo de volcanes de Jinamar.
Se trascribe la carta:
"Como sabe este colectivo ha manifestado reiteradamente ante las autoridades competentes su preocupación con el daño que su explotación pueda causar a la montaña Rajada.
Los inicios de su actividad minera fueron en el año 1973, mucho antes de que existiera en la administración una sensibilidad con los espacios naturales, geológicos y culturales de Canarias. Después vinieron las sucesivas leyes de protección de los ENP (1987-1994 y ahora Texto Refundido del 2000).
Sin embargo, su explotación mantiene su ritmo de extracción y la montaña Rajada, imperterrita observadora de su empresa, continua en delicada situación, en una estrecha servidumbre, entre el desplome de la montaña y su supervivencia.
Esa es nuestra preocupación: la montaña. Queremos tenerla, disfrutarla, vivirla. Queremos además que el día de mañana, tanto las generaciones futuras como turistas y visitantes, científicos y meros observadores puedan seguir viendo la emblemática Montaña Rajada o Barquilla, como popularmente se le conoce en los barrios colindantes.
A parte de este arraigo cultural, este referente en el paisaje del horizonte para los vecinos del Lomo Blanco, la Montaña Rajada, es un pequeño aparato de emplastes soldados, abierto por la mita, por una fractura norte-sur, que responde más a la conceptualización de un hornito, dispuesto como una boca adventicia, que a la de un cono piroclástico, lo cual lo diferencia considerablemente del resto de los aparatos eruptivos de Gran Canaria. Existe numerosa bibliografía al respecto sobre el ámbito de Bandama, cuya edad, según el carbono-14, estaría en torno a los 1.100 años a. C.; y el denominado Campo de Volcanes de Jinámar, con volcanes como la Mña Pelada, Mña del Gallego, Mña Rajada, Mña Cuesta de la Gallina y la Sima de Jinámar. La contemporaneidad de estos tres últimos dio como resultado la fusión en una singular colada.
Estimado Sr. Martín Vega, después de esta líneas queremos que considere nuestra preocupación, haciéndola suya y respetando la montaña Rajada. Confiamos en su comprensión, no obstante quedamos a su disposición para cualquier aclaración que estime oportuna"
El Presidente del C.E. Turcón
Se trascribe la carta:
"Como sabe este colectivo ha manifestado reiteradamente ante las autoridades competentes su preocupación con el daño que su explotación pueda causar a la montaña Rajada.
Los inicios de su actividad minera fueron en el año 1973, mucho antes de que existiera en la administración una sensibilidad con los espacios naturales, geológicos y culturales de Canarias. Después vinieron las sucesivas leyes de protección de los ENP (1987-1994 y ahora Texto Refundido del 2000).
Sin embargo, su explotación mantiene su ritmo de extracción y la montaña Rajada, imperterrita observadora de su empresa, continua en delicada situación, en una estrecha servidumbre, entre el desplome de la montaña y su supervivencia.
Esa es nuestra preocupación: la montaña. Queremos tenerla, disfrutarla, vivirla. Queremos además que el día de mañana, tanto las generaciones futuras como turistas y visitantes, científicos y meros observadores puedan seguir viendo la emblemática Montaña Rajada o Barquilla, como popularmente se le conoce en los barrios colindantes.
A parte de este arraigo cultural, este referente en el paisaje del horizonte para los vecinos del Lomo Blanco, la Montaña Rajada, es un pequeño aparato de emplastes soldados, abierto por la mita, por una fractura norte-sur, que responde más a la conceptualización de un hornito, dispuesto como una boca adventicia, que a la de un cono piroclástico, lo cual lo diferencia considerablemente del resto de los aparatos eruptivos de Gran Canaria. Existe numerosa bibliografía al respecto sobre el ámbito de Bandama, cuya edad, según el carbono-14, estaría en torno a los 1.100 años a. C.; y el denominado Campo de Volcanes de Jinámar, con volcanes como la Mña Pelada, Mña del Gallego, Mña Rajada, Mña Cuesta de la Gallina y la Sima de Jinámar. La contemporaneidad de estos tres últimos dio como resultado la fusión en una singular colada.
Estimado Sr. Martín Vega, después de esta líneas queremos que considere nuestra preocupación, haciéndola suya y respetando la montaña Rajada. Confiamos en su comprensión, no obstante quedamos a su disposición para cualquier aclaración que estime oportuna"
El Presidente del C.E. Turcón
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