La Cotmac aborda la declaración de impacto de la vía Agaete-La Aldea con una propuesta benévola

La Provincia, 3-4-2006

Aníbal Ramírez

La Comisión de Ordenación del Territorio y Medio Ambiente de Canarias (Cotmac) aborda este lunes la declaración de impacto ambiental sobre la futura autovía de Agaete a La Aldea. La propuesta elaborada para su debate en la reunión da el visto bueno a su ejecución, condicionada a la aplicación de una docena de medidas correctoras además de la previstas en el proyecto de trazado.

Entre los condicionantes que dispone la Viceconsejería regional de Medio Ambiente destaca el minimizar la fragmentación del territorio y el impacto paisajístico que tendrá el paso de la autovía a través de cortes a cielo abierto de montañas con una media de 15 metros de altura sustituyéndolos por falsos túneles.

Estas ´trincheras´, con casos puntuales de 40 metros de altura y que tienen algún ejemplo en la circunvalación capitalina, afectan a unos dos kilómetros de la futura carretera entre Agaete y La Aldea cuyo trazado discurre por el interior del Parque Natural de Tamadaba, considerado también Lugar de Interés Comunitario por Europa, Zona Especial de Protección de Aves e incluido en la Reserva de la Biosfera de Gran Canaria.

La sustitución de estos impactantes tajos, con especial incidencia en el tramo que conecta El Risco con La Aldea, queda en cualquier caso supeditada a la viabilidad técnica y ambiental de ejecutar los falsos túneles por la contrata. La medida obliga en su caso que las superficies resultantes de dichos falsos túneles deberán plantarse con las mismas especies propuestas para la repoblación de los taludes que se creen en la vía.

El impacto sobre el paisaje, al igual que el obtenido por la alteración topográfica, es el más elevado. De hecho, el estudio de impacto del proyecto de trazado reconoce que es significativo. Así, la propuesta de declaración de impacto ambiental que debatirá la Cotmac condiciona que los terraplenes previstos en Guayedra deben ser resueltos por otras alternativas, así como la disminución de los taludes en general.

La integración paisajística de los viaductos, pantallas antirruido, taludes de desmonte, muros y demás estructuras es otra de las medidas correctoras a imponer. Se plantea el envejecimiento de la roca con el fin de conseguir su integración cromática con el entorno. Para aminorar el impacto paisajístico se dispone como condicionante plantarse la totalidad de la superficie de los terraplenes ubicados en el interior del Parque Natural de Tamadaba. Asimismo, en la desembocadura de los túneles deberán prolongarse sus embocaduras y en su caso cubrirse con el material sobrante de movimientos de tierras y la plantación de especies.

La propuesta de declaración de impacto de la Viceconsejería de Medio Ambiente del Gobierno de Canarias no se pronuncia sobre la principal queja de los ecologistas que es la concepción de la futura carretera entre Agaete y La Aldea como una vía de alta velocidad (C-80) cuando el Plan Rector de Uso y Gestión de Tamadaba hace hincapié en que deberán prevalecer los valores medioambientales sobre el concepto de velocidad. Algunos departamentos como el Servicio de Medio Ambiente y el Patronato de Espacios Naturales han solicitado, en coincidencia con los ecologistas, que la futura vía se ajuste a lo estipulado por el PRUG de Tamadaba. Por su parte, el Cabildo de Gran Canaria emitió un informe general favorable al proyecto de trazado de la nueva carretera Agaete-La Aldea.