Granadilla sigue en el debate

Señor Martín, es usted el que está equivocado

Artículo de opinión de Francisco Cabrera, ingeniero industrial.

Dice usted que los manifestantes contra el puerto de Granadilla están equivocados y nos pone como ejemplo el aeropuerto de Denver, situado en el estado de Colorado que con una superficie de 270.000 kilómetros cuadrados tiene hueco suficiente para cuantas pistas quiera, le recuerdo que la superficie de Canarias no llega a los 8.000 kilómetros cuadrados. Debería usted tomar un ejemplo más cercano, como el aeropuerto de Gatwick, que con una sola pista y con limitaciones operativas entre las 22.00 y las 06.00 horas atendió en el año 2004 a treinta y un millones de pasajeros -más que todos los aeropuertos canarios juntos- y que tiene planificado con esa sola pista llegar a mover 38 millones de pasajeros. Pero claro, en Gran Bretaña no toman como ejemplo a Colorado y se dan cuenta de que viven en un espacio reducido y sobrepoblado, susceptible de un mejor uso que el de construir infraestructuras innecesarias.

Toda la cantinela que ustedes se traen con la Plataforma Logística Intercontinental como alternativa de progreso y diversificación económica para Canarias, no tiene fundamento sustancial. La actividad logística del puerto de Algeciras, junto a la zona industrial del Campo de Gibraltar, aportó a la economía de Cádiz en el año 2003 unos magros 256 millones de euros. Me permito recordarle que el valor añadido del turismo en Canarias, en ese mismo año fue de 6.528 millones. Por lo tanto, ¿de qué alternativa estamos hablando? Cuando incluso es difícil que Granadilla llegue a ser lo que actualmente es el puerto de Algeciras.

Si algunos de sus asesores confía en las ventajas que el tejido productivo industrial de nuestras Islas pueda obtener de esa Plataforma Logística, le aconsejo que analice el que actualmente está obteniendo de la conectividad del puerto de Las Palmas, que es prácticamente nulo. Las actuales infraestructuras portuarias del Archipiélago tienen margen más que suficiente para incrementar el trasiego de contenedores y comprobar si nuestro tejido industrial despierta y se aprovecha del mismo, cosa bastante difícil cuando las regiones manufactureras de Europa se están desindustrializando. No tenemos necesidad de impactar más nuestro territorio para ver si sucede algo que seguramente nunca sucederá.

La única actividad que ha permitido, y seguirá permitiendo, que casi dos millones de personas vivan en nuestras Islas con un estándar de vida europeo es la turística. Todas y cada una de las restantes actividades tienen que vivir del tirón que da la renta turística y tendrían que complementar en todos los sentidos esa actividad que ha permitido que por primera vez en 2.500 años la mayoría de los habitantes de estas Islas se acuesten todas las noches con el estómago lleno.
Con infraestructuras disparatadas, antieconómicas y sólo posibles a base de subvenciones públicas estaremos afectando irremediablemente uno de los atractivos que vienen buscando nuestros turistas, que es un territorio lo más virgen posible. Para el bienestar y el futuro de los canarios, el puerto de Granadilla, las nuevas pistas de los aeropuertos y las regasificadoras no son en absoluto necesarias, y si ustedes creen que lo son, deberían mostrar datos y estudios que lo avalen -los podrían colgar en la website del Gobierno- y no utilizar argumentos, palabrería e ilusiones de casino, de los que yo como canario me siento avergonzado.