Fumigan el teatro Pérez Galdos con un veneno que daña la capa de ozono

CanariasAhora.com, 1-10-2004

Durante la semana que ahora termina, se fumigó el teatro Pérez Galdós con bromuro de metilo, un gas reconocido desde 1992 como uno de los responsables del deterioro de la capa de ozono y cuyo uso en Holanda está prohibido con sólo la excepción de alguna cuarentena. Según Sergio Chinea, director técnico de Faycan, empresa encargada de realizar la fumigación, el objetivo de la acción fue la eliminación de las termitas que afectaban a la madera del viejo teatro.
CANARIASAHORA. Las Palmas de Gran Canaria

La acción comenzó el lunes con la propagación mediante ventiladores del bromuro de metilo en el interior del recinto teatral. Durante 36 horas el Pérez Galdós permaneció sellado a cal y canto y se creó un recinto de seguridad alrededor dada la alta toxicidad del producto, capaz de "eliminar todos los organismos vivos con que entra en contacto", según se recoge en la página web www.infoagro.com.

Precisamente por esa efectividad "se considera que es un producto económico" y se utiliza en la fumigación agrícola. "La FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación) concreta el nivel de tolerancia en alimentación humana en 0,3 mg de bromuro por kilogramo de peso corporal".

En el caso del teatro, se emplearon 30 gramos por metro cúbico, lo que obligó a extremar las medidas de seguridad. Sergio Chinea explicó a CanariasAhora que se escogió la utilización de este producto por "tratarse de un edificio aislado", lo que permitía establecer un perímetro que evitara que los ciudadanos pudieran entrar en contacto con el gas.

La acción del gas no sólo afecta a los organismos adultos vivos, sino que también "elimina los huevos" o larvas. De este modo, si ratas o cucarachas habían encontrado cobijo en el teatro, encontraron allí su final al igual que las termitas.

Este viernes, operarios de la empresa penetraron en el edificio "con botellas de oxígeno" para proceder a la total ventilación del inmueble, labor imprescindible para hacerlo nuevamente apto para la estancia de humanos en su interior.

Entre los efectos perjudiciales del bromuro de metilo para el Medio Ambiente se encuentra el tratarse "de un producto que se degrada con dificultad y puede acumularse en exceso, sobre órganos aprovechables de las plantas cultivadas, pudiendo constituir un peligro para la salud humana", siempre según www.infoagro.com

La Unión Europea adoptó una normativa en 1994 que obligó a reducir en un 25% la producción y suministro de bromuro de metilo en 1998, respecto a los niveles de 1991. La excepción a esta norma la constituyen los usos "para cuarentena y preembarque". En Holanda, la única excepción para su uso la constituyen algunos procesos de cuarentena.

Sergio Chinea confirmó que la operación se realizó con éxito y que ahora se procederá al tratamiento de la madera para evitar futuras infecciones de insectos xilófagos -los que se alimentan de madera-.